• No results found

Actitudes hacia el castellano y el catalán

N/A
N/A
Protected

Academic year: 2021

Share "Actitudes hacia el castellano y el catalán "

Copied!
40
0
0

Loading.... (view fulltext now)

Full text

(1)

Examensarbete

Kandidatexamen

Actitudes hacia el castellano y el catalán

Un estudio sociolingüístico entre veinteañeros

y sus padres en el ámbito metropolitano de Barcelona

Författare: Johan Tingsvall Handledare: Pierre Andersson Examinator: Carolina León Vegas Ämne/huvudområde:

Kurskod: Spanska Poäng: 15

Högskolan Dalarna 791 88 Falun Sweden

Tel 023-77 80 00

(2)

Abstract:

This study focuses on the attitudes toward Catalan and Spanish, the two main languages spoken in Barcelona, on the East coast of Spain, in Southwestern Europe.

The aim of this study was to compare those attitudes between two generations of informants. The informants of one generation were born 1984-93 and were thus in their twenties at the time of the investigation, in 2013. The aforementioned generation was labelled with the name "Children", whereas their parents were labelled with the name "Parents". The method applied was direct, where the informants had to answer an online survey, and the number of informants that were studied was 15 for each generation, or 30 in total.

The conclusion of the study, derived from the results to the aforementioned survey, is that the generation of the Children have a more positive attitude toward Catalan and more negative toward Spanish than the generation of the Parents.

Keywords:

attitudes, Catalan, Spanish, Barcelona, instrumental, integrative

(3)

Índice

1. Introducción ... 1

1.1 Historia ... 2

1.2 Actualidad ... 4

1.3 Estado de la cuestión ... 5

2. Objetivo e hipótesis ... 6

3. Metodología ... 6

3.1 Datos generales ... 9

4. Teoría ... 11

4.1 Actitudes ... 12

5. Presentación y análisis de los resultados ... 13

5.1 Autoevaluación de nivel y usos ... 14

5.1.1 Reflexión sobre la autoevaluación de nivel y usos ... 16

5.2 Actitudes ... 17

5.2.1 Actitudes generales ... 17

5.2.1.1 Reflexión sobre las actitudes generales ... 19

5.2.2 Actitudes instrumentales ... 21

5.2.2.1 Reflexión sobre las actitudes instrumentales ... 22

5.2.3 Actitudes integrativas ... 22

5.2.3.1 Reflexión sobre las actitudes integrativas ... 23

6. Conclusiones ... 24

7. Bibliografía ... 26

7.1. Fuentes electrónicas ... 27

8. Anexo 1 ... 31

9. Anexo 2 ... 34

(4)

1

1. Introducción

En este estudio vamos a analizar las actitudes hacia la lengua catalana y la lengua castellana en la zona en la que más hablantes del catalán se concentran, en convivencia con el castellano: en el ámbito metropolitano de Barcelona, España (Idescat, 2011a; Idescat, 2011b; ASOLC, 2007: 3)1. La pregunta que nos planteamos es la siguiente: ¿hay una diferencia de actitudes hacia el castellano y el catalán entre dos generaciones de barceloneses?

Para comprobar si efectivamente hay una diferencia en las actitudes lingüísticas entre dos generaciones, como se presentó en el estudio “Lengua y jóvenes. Usos y percepciones lingüísticos de la juventud catalana” (n.t.) (Generalitat de Catalunya, 2010: 22), en el que se estudiaba a jóvenes de entre 15 y 34 años (Generalitat de Catalunya, 2010: 12), nos planteamos exactamente a qué dos generaciones estudiar. Nos ayudó a acotar la franja de edad de una de las generaciones a justamente la de los veinteañeros del ámbito metropolitano de Barcelona el hecho de constatar que en nuestra estancia en Cataluña, la mayoría de gente con la que tuvimos contacto actualmente reside en esa zona y está en esa franja de edad, es decir, que nació entre 1984 y 1993. Elegimos incluir también a sus progenitores para poder comprobar con más concreción esta diferencia en las actitudes lingüísticas entre dos generaciones: en el estudio citado se limitaban a referirse a los usos lingüísticos de los hijos con sus progenitores y descendencia (Generalitat de Catalunya, 2003 citado por Generalitat de Catalunya, 2010: 23), mientras que en nuestro estudio analizaremos las actitudes de tanto padres como hijos.

Cabe destacar que la inmersión lingüística, aplicada en Cataluña progresivamente a partir de los años ochenta en el sistema educativo para convertir el catalán en la lengua vehicular, además de enseñar castellano y otras lenguas, afecta de lleno a toda la generación nacida entre 1984 y 1993. Por ello, podemos presuponer en todos los hijos que sean bilingües castellanohablantes y catalanohablantes en algún grado. A partir de ahora, nos referiremos a los dos grupos de edad ya mencionados llamándolos por regla “padres” e “hijos”.

Por su parte, la situación lingüística del grupo de los padres está condicionada por el hecho de que se intentase aplicar una política de sustitución lingüística del catalán por el castellano

1 En total hay unos 9,1 millones de hablantes del catalán, unos 5,3 millones de los cuales en Cataluña: por lo tanto, Cataluña es el territorio catalanohablante con más hablantes del catalán, ya que concentra a más de la mitad de ellos.

De esos 5,3 millones, unos 3,3 millones se concentran en el ámbito metropolitano de Barcelona: de nuevo, por lo tanto, Barcelona es la subdivisión territorial con más hablantes del catalán porque concentra a más de la mitad de los catalanohablantes de Cataluña.

(5)

2

durante buena parte del siglo XX y que algunos de ellos sean inmigrantes llegados desde zonas castellanohablantes de España (ver apartado 1.1).

Finalmente, queremos aclarar que el ámbito metropolitano de Barcelona incluye el municipio de Barcelona y su entorno, delimitado por las comarcas del Barcelonès, el Maresme, el Vallès Oriental, el Vallès Occidental y el Baix Llobregat en el “Plan territorial general de Cataluña” (n.t.) (DOGC, 2010). Nos referiremos al ámbito metropolitano de Barcelona de manera general como “Barcelona”. A continuación, presentamos un resumen de su historia y la de sus lenguas a grandes rasgos, ligadas fundamentalmente a la historia de Cataluña y España. Más adelante, nos centraremos en su actualidad en el apartado 1.2 y en el estado de la cuestión en el apartado 1.3.

1.1 Historia

Tanto el castellano como el catalán son lenguas romances o derivadas del latín, aparecidas en la zona norte y noreste de la península ibérica, respectivamente, entre principios y mediados de la edad media.

Ambas lenguas se asociarían con el tiempo con dos reinos que formarían sendas coronas ibéricas, es decir, dos conjuntos de reinos: el reino de Castilla y el reino de Aragón, que al incorporar a otros reinos pasarían a ser la corona de Castilla y la corona de Aragón (Alvar Ezquerra, 2001: 49, 151).

Los territorios de habla predominantemente catalana de la corona de Aragón y los territorios predominantemente de habla castellana de la corona de Castilla acabarían formando parte de una misma corona de España, junto a otros reinos diferentes, entre finales de la edad media e inicios de la edad moderna, mediante una unión dinástica (Turell, 2001: 61).

A partir de ese momento, la producción de textos en catalán cae progresivamente comparada con la vitalidad alcanzada durante la edad media. Esto coincide con la época de mayor expansión de la corona de España, fundamentalmente mediante la colonización de América, así como de la producción literaria en castellano, en la época moderna (Turell, 2001:

61).

Sin embargo, ambas coronas conservarían instituciones de gobierno y leyes diferenciadas

(6)

3

hasta finales de la edad moderna, cuando, después de una guerra en que la corona de Aragón se había acabado alineando con el bando que a la postre perdió, se abolieron las aragonesas, valencianas y catalanas. Estas últimas incluían en aquella época las baleares, además de las de los diferentes condados catalanes. Estas leyes e instituciones relativamente descentralizadas que comentamos fueron sustituidas por las de la corona de Castilla, que en ese momento histórico estaba más centralizada administrativamente que la de Aragón, por lo que la corona de España pasa a ser en la práctica y con contadas excepciones a partir de ese momento el reino de España actual (Artola, 1999: 27).

Coincidiendo con este hecho, se iniciaría el primer intento institucionalizado de sustitución lingüística del catalán por el castellano a gran escala que se ha documentado. En este caso, el principal objetivo era la castellanización de la aristocracia y el clero locales. Una fórmula similar, aunque a una escala demográfica más amplia, se aplicaría de nuevo más adelante en el siglo XX, durante las dictaduras de Miguel Primo de Rivera 1923-1930 y de Francisco Franco 1936-1975 (Mallart Navarra, 2006: 252-265).

Estos intentos se inspiraron en los llevados a cabo en el reino de Francia a partir del siglo XVII (Mallart Navarra, 2006: 251), donde, ya en época contemporánea, acabarían teniendo un mayor éxito a nivel global en sus territorios catalanohablantes (Generalitat de Catalunya, 2004:

18), cedidos en época moderna tras ganar otra guerra diferente contra la corona de España.

Por otro lado, también en la época contemporánea y en concreto durante el siglo XIX, se popularizó progresivamente entre la burguesía catalana el renacimiento o la ‘renaixença’ literaria como movimiento contrario al anterior y con la que la producción de textos en catalán se recuperaría hasta cierto punto y hasta el día de hoy, incluyendo la elaboración de un diccionario y una gramática normativos (Gracia Sánchez, 2012: 1).

Ello coincidió con la revolución industrial y los primeros grandes flujos migratorios, principalmente desde zonas castellanohablantes rurales a zonas catalanohablantes industrializadas en Barcelona, que tendrían más recientemente su punto álgido en los años sesenta del siglo XX.

Esta concienciación a través de la literatura a la que nos referimos fue además el germen de lo que serían los diferentes movimientos políticos catalanistas o con el catalán como uno de los puntos programáticos fundamentales, que sobre todo en los periodos de democracia del siglo XX tuvieron una importancia creciente en la política local y regional, así como, más adelante,

(7)

4

también en la española, ya trascendiendo el marco primordialmente burgués inicial (Turell, 2001:

62).

1.2 Actualidad

El catalán es hoy una lengua con unos nueve millones de hablantes (y unos dos millones más con conocimientos de ella), de los cuales aproximadamente seis millones la usan en su ámbito familiar (Generalitat de Catalunya, 2007 citado por ASOLC, 2007: 2-4), con una área de influencia centrada alrededor de la costa este de la península ibérica. Este área abarca cuatro países diferentes, España, Andorra, Francia e Italia, en todos los cuales convive con otras lenguas con más hablantes. Todos sus hablantes son, por ello, en principio y al menos, bilingües. La gran mayoría de la población catalanohablante se concentra en España, en cinco Comunidades Autónomas diferentes, tres de las cuales la tienen como lengua cooficial junto al castellano:

Cataluña, la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares (Siguan, 2007: 1). De esas Comunidades Autónomas, la que tiene un mayor número de personas catalanohablantes es Cataluña.

Finalmente, dentro de Cataluña, la zona que mayor número de hablantes del catalán concentra (Idescat, 2011a; Idescat, 2011b; ASOLC, 2007: 3) es la que, como hemos adelantado, estudiaremos: el ámbito metropolitano de Barcelona.

Finalmente, cabe añadir que un asunto sociopolítico de especial relevancia para nuestra investigación es que en los últimos años una parte significativa de la población catalana ha pasado a dar apoyo a una posible independencia de Cataluña de España: en el último estudio publicado por el Centro de Estudios de Opinión (n.t.) de la Generalitat al respecto, a diferencia de pocos años antes, la opción mayoritaria de los encuestados es que preferirían un estado catalán independiente (CEO, 2013: 32) y votarían a favor de la independencia en un referéndum (CEO, 2013: 34). En su equivalente a nivel estatal, el Centro de Investigaciones Sociológicas, se ha planteado una pregunta ligeramente diferente, en la que la opción mayoritaria en las respuestas de los encuestados catalanes es que quisieran un Estado en el que las Comunidades Autónomas pudiesen independizarse (CIS, 2012).

(8)

5

1.3 Estado de la cuestión

Los diferentes gobiernos catalanes en democracia han dado una especial importancia a la política lingüística como consecuencia de los planteamientos catalanistas mayoritarios en Cataluña, comentados en 1.1 y 1.2.

Esto incluye elaborar censos lingüísticos periódicos, así como otros estudios y encuestas de usos lingüísticos. Son las últimas las que más nos interesan, ya que incluyen asimismo cuestiones relacionadas con las actitudes lingüísticas.

En concreto, en la última encuesta de este tipo publicada2, se llegó a la conclusión de que en Cataluña hay una actitud en general más positiva hacia el catalán que hacia el castellano: hay más personas que tienen el castellano como lengua inicial3, comparado con el catalán, pero también hay más gente que se identifique con el catalán, aunque no sea su lengua inicial, que con el castellano (Generalitat de Catalunya, 2009: 16).

Otro estudio relevante es el último de “usos y percepciones lingüísticos de la juventud catalana” (n.t.) ya mencionado en el capítulo 1, en el que se entrevistó a jóvenes de entre 15 y 34 años (Generalitat de Catalunya, 2010: 12) y en el que también se concluye que hay una mayor hibridación4 entre los castellanohablantes de origen y que el uso del catalán con los hijos reforzará la situación del catalán como lengua inicial en el futuro (Generalitat de Catalunya, 2010: 31).

En este estudio, en cambio, y como hemos adelantado, nos fijaremos en una franja de edad más limitada en los jóvenes para comparar sus actitudes lingüísticas con las de sus padres, como explicaremos más en detalle en el capítulo 3. Es un estudio que no se ha realizado antes, según hemos podido comprobar en los buscadores en línea de LIBRIS, DiVA, Google Scholar, JSTOR y CCUC.

2 Está previsto que la encuesta elaborada durante 2013 por la Generalitat esté disponible durante la primavera de 2014, (Generalitat de Catalunya, 2013) por lo que no podrá ser usado a tiempo por este estudio, que se prevé finalizar a finales de 2013.

3 ’Lenguas iniciales’ son las aprendidas en la infancia y usadas con los progenitores (ver capítulo 4).

4 ’Hibridación’ quiere decir el empleo habitual de dos lenguas (ver capítulo 4).

(9)

6

2. Objetivo e hipótesis

El objetivo de nuestra investigación es encontrar respuestas para la siguiente pregunta:

- ¿Hay una actitud diferente en los hijos y en los padres hacia el catalán y el castellano?

La hipótesis inicial que tenemos es que hay unas actitudes lingüísticas más positivas hacia el catalán entre los hijos que entre los padres, así como unas actitudes más negativas hacia el castellano entre los hijos que entre los padres.

Estas actitudes se dividen en actitudes generales, instrumentales e integrativas (ver apartado 4.1) y serán medidas mediante una encuesta, que explicaremos más en detalle a continuación en el capítulo 3 sobre la metodología. Después del ya mencionado capítulo 4, sobre la teoría, el siguiente paso será presentar y analizar los resultados a lo largo del capítulo 5. Finalmente, en el capítulo 6 presentaremos las conclusiones a las que hemos llegado como consecuencia de lo visto en el capítulo 5.

3. Metodología

La metodología escogida es directa y cuantitativa. Se usó un cuestionario de 26 preguntas, en su mayoría cerradas, mediante la herramienta en línea Google Drive5, con la que cuestionamos a 15 parejas de padres e hijos que forman dos grupos de informantes: el de los padres y el de los hijos (ver Anexo 1).

De este modo se esperaba poder realizar la encuesta a distancia y al mismo tiempo simplificar el análisis de los resultados, usando el sistema de estadística de Google Drive de forma análoga a la aplicada por Fairweather (2013: 22).

En cuanto a los permisos legales, la empresa Google da licencia para usar todos sus servicios, incluyendo el de albergar y gestionar una encuesta u otros archivos, a cambio de que los autores se registren y de que Google pueda derivar información y archivos enteros, además de publicidad personalizada, a partir de esos archivos. Todo esto sin quitarle a los autores los

5 Herramienta para almacenar, editar entre varios usuarios y compartir archivos en la llamada ‘nube’ de Internet, incluyendo encuestas. Que esté en la nube tiene la ventaja de que en principio no es necesario tener prácticamente ningún archivo ni programa más que el sistema operativo y el navegador instalados en el ordenador (o dispositivo en línea en cuestión) para poder acceder a esta información, ya que la gran mayoría de información queda grabada en los servidores de la empresa o ente que ofrece el servicio, en este caso Google.

(10)

7

derechos de autor en ningún caso, a menos que se infrinjan los derechos de autor de un tercero, y siempre sin necesidad de que los encuestados se registren (Google, 2013).

Esperábamos poder utilizar un número mayor de informantes, pero las diferentes restricciones impuestas hicieron que solo pudiéramos utilizar las respuestas de 30 de los 61 informantes6. Se enviaron invitaciones para acceder a la encuesta a 100 conocidos barceloneses que se sabía que residían en la zona a estudiar, y se les pidió que, además de rellenarla ellos mismos, también hicieran responder a uno de sus progenitores a esas mismas preguntas, por lo que el máximo posible de informantes era de 200. Adicionalmente, se les pidió que nos confirmaran el momento en el que rellenaran su encuesta a través de un mensaje para poder llevar la cuenta más fácilmente. Por último, les informamos de que su participación sería anónima.

Recibimos todas las respuestas en el plazo de una semana, a mediados de octubre de 2013.

Se tuvo contacto previo con estos conocidos principalmente durante nuestros estudios secundarios y terciarios en Barcelona, aproximada y principalmente desde el año 2000 hasta el año 2010. Sabíamos de antemano que había hijos con padres que eran inmigrantes de primera generación llegados desde zonas de España en las que no se habla el catalán y que, en cambio, la proporción de padres nacidos fuera de España o en otras zonas catalanohablantes entre ellos no era muy alta.

Se les preguntó sobre su sexo y edad, lugar de nacimiento, origen y año de llegada si se ha nacido fuera de zonas catalanohablantes, origen de sus padres, en qué grado consideran que entienden el catalán/castellano hablado/escrito y si lo saben hablar/escribir, lenguas maternas, lenguas de identificación, en qué hablan ahora, en qué hablan o hablaban con sus progenitores, en qué hablan o hablarían con sus descendientes, en qué creen que hablarán en el futuro, en qué creen que se hablaría si Cataluña se independizara, qué creen que debería hablarse en el futuro en Cataluña, qué lengua de las dos tiene más prestigio y si creen que una u otra les es útil y/o les ayuda a integrarse en su entorno (ver anexo 1).

Estas preguntas se dividen en tres grupos: datos generales, autoevaluación de nivel lingüístico y usos, y actitudes. En cuanto a las preguntas sobre actitudes, se subdividen a su vez en actitudes generales, instrumentales e integrativas (ver apartado 4.1).

6 En concreto, por una parte algunos informantes del grupo de los hijos no cumplían la condición de tener menos de 30 años de edad, mientras que por otra, otros informantes no nos confirmaron el haber rellenado la encuesta, con lo que no pudimos estar seguros de quién era descendiente o progenitor de quién.

(11)

8

Se trata de una adaptación inicial del cuestionario de Gracia Sánchez (2012: 26), basado a su vez en Climent i Castelló (1986) y Pastor i Pujadó (1997), junto con una adaptación del cuestionario de Westin (2013: 30-32), basado a su vez en Baker (1992), aunque en vez de centrarnos tan solo en las actitudes hacia el catalán como en esos casos, lo haremos hacia tanto el catalán como el castellano.

Hemos decidido valorar numéricamente las respuestas originales respecto a las preguntas en las que los informantes tenían que escoger entre las dos lenguas del estudio (preguntas 14-26, ver Anexos 1 y 2) asignándoles una puntuación del -100 al 100, donde -100 es en la que más peso tiene el castellano y 100 la que más peso tiene el catalán. El punto de equilibrio entre lenguas se sitúa, por tanto, en 0 puntos, mientras que una puntuación de -50 implica un 50% de desequilibrio a favor del castellano, por ejemplo. Las opciones proporcionadas para las respuestas eran “Solo castellano” (-6⅔ puntos), “Más castellano que catalán” (-3⅓ puntos), “Catalán y castellano por igual” (0 puntos), “Más catalán que castellano” (3⅓ puntos) y “Solo catalán” (6⅔ puntos), originalmente presentadas en orden inverso (ver Anexos 1 y 2). El uso de estas puntuaciones fraccionadas se debe a que disponemos de 15 informantes en cada generación y la suma de 15 respuestas de -3⅓ puntos da -50, la de 15 respuestas de 6⅔ puntos da 100, etc. A partir de ahora, sin embargo, presentaremos estos resultados redondeándolos sin decimales para simplificar la lectura e interpretación de los datos. También usaremos esta forma de cuantificación para valorar los saltos generacionales, es decir, las diferencias en las puntuaciones de los dos grupos estudiados.

Como hemos comentado al final del apartado 1.1, tanto en la historia contemporánea como en la actualidad, a los inmigrantes llegados a Barcelona desde otras zonas catalanohablantes se les ha tratado como “autóctonos”, mientras que las personas llegadas de zonas en las que se hablan otras lenguas, independientemente de provenir del mismo país o no, han recibido trato de

“forasteros”. Así lo reflejamos en nuestra encuesta al diferenciar entre nacidos en zonas catalanohablantes y en otros sitios, pese a ser conscientes de que, estrictamente, todo el mundo sea inmigrante, de una generación o de otra.

Se ha procurado mantener un número bajo de preguntas para que los informantes lo pudiesen rellenar de forma rápida y fácil. También se ha decidido informarles en la invitación del objetivo del estudio a grandes rasgos, ya que en cualquier caso sería evidente al leer las preguntas

(12)

9

y juzgamos que podía atraer a más informantes que si solo se informaba de que era una encuesta, al tratarse de un tema de actualidad permanente en la sociedad catalana. La última decisión consistió en hacer el cuestionario bilingüe y con el catalán antes del castellano, siguiendo la tendencia vigente en Cataluña.

Adicionalmente, consideramos necesario adelantar que hay una pregunta del cuestionario que hemos clasificado como de actitudes más que de usos al analizarlas, pese a que podrían considerarse como perteneciente a cualquiera de las dos categorías o a ambas a la vez (ver apartado 5.2.1.1).

3.1 Datos generales

Las diferentes preguntas cubren el sexo, la edad y el lugar de nacimiento propio y de sus progenitores. Empezamos presentando la distribución de informantes por sexo y edad:

Sexo

Edad Mujeres Hombres Total

>50 8 7 15

<30 7 8 15

Tabla 1. Número de participantes distribuidos por edad (en años) y sexo. Fuente: preguntas 1-2.

Hay una paridad total entre hombres y mujeres, pese a ser un número impar de parejas de padres e hijos: hay una mujer más entre los padres y un hombre más entre los hijos. Sin embargo, las diferencias según sexo en las respuestas de esta investigación no son notables en ninguna de las dos generaciones, por lo que no profundizaremos en su estudio. En cuanto a la edad, la de los hijos es siempre menor de 30 años, además de mayor de 20, como ya se ha mencionado, y la de los padres es siempre mayor de 50 años.

En la tabla presentada a continuación, nos fijaremos en los lugares de nacimiento. Vemos que en un tercio de los casos (4+1=cinco de quince) los padres estudiados son inmigrantes de primera generación, uno de los cuales nacido fuera de España, y solo uno de los hijos:

(13)

10

Lugar de nacimiento Territorio de habla catalana Resto de España Otros

Padres 10 4 1

Hijos 14 1 0

Tabla 2. Número de informantes divididos por generación y lugar de nacimiento. Fuente: pregunta 3.

De los padres inmigrantes de primera generación, uno llegó con su hijo en 1998 desde Andalucía.

Queremos destacar que su hijo llegó de pequeño a Barcelona y que sus resultados no difieren del resto de hijos ni inmigrantes. El padre que hemos mencionado que nació fuera de España lo hizo en Suecia y llegó a Barcelona, después de pasar por Extremadura, en 1991. De nuevo, queremos destacar que sabemos que habla solo en castellano con su hijo nacido en Barcelona, cuyos resultados no difieren del resto de hijos ni inmigrantes. Finalmente, un padre llegó desde Andalucía en 1962 y dos llegaron desde Castilla la Mancha en 1962 y 1960 (Fuente: pregunta 4).

Como se adelantaba en el apartado 1.1 y se ve reflejado en las respuestas a las encuestas, una parte significativa de la inmigración de los años 60 llegó a Barcelona desde zonas castellanohablantes del sur de España.

Por último, nos fijamos en el lugar de nacimiento de las parejas de progenitores de ambas generaciones. Los resultados de la tabla anterior y la siguiente son diferentes respecto al origen de los padres porque en la anterior se tenía en cuenta el lugar de nacimiento de uno de los progenitores, mientras que en la siguiente tabla se preguntó por los dos:

Lugar nacimiento progenitores

Los dos en territorios de habla catalana

Uno de cada Los dos en territorios de habla no catalana

Padres 3 4 8

Hijos 8 2 5

Tabla 3. Número de informantes, divididos por generación y lugar de nacimiento de sus progenitores. Fuente:

pregunta 5.

Vemos que los números casi se invierten de una generación a otra: una mayoría de los progenitores de los padres nacieron fuera de un territorio catalanohablante (8*2+4*1=20 de 30, dos tercios), mientras que una mayoría de los progenitores de los hijos lo hicieron en territorios de habla catalana (8*2+2*1=18 de 30). También vemos que hay por lo menos 3 padres más que

(14)

11

son inmigrantes, además de los 5 padres inmigrantes de primera generación ya identificados entre los informantes: en este caso son de segunda generación, por haber nacido en 8 casos ambos progenitores de los padres en territorios de habla no catalana (8-5=3). Queremos aclarar, por último, que aunque sí que hemos detectado una diferencia notable entre los hijos inmigrantes de segunda generación y el resto de hijos en sus respuestas a nuestra encuesta, por motivos de tiempo y espacio es un análisis que, aunque originalmente queríamos incluir aquí, finalmente esperamos poder llevar a cabo fuera del marco de este estudio.

4. Teoría

La sociolingüística es una disciplina que estudia lenguas o variedades de lenguas en su entorno social (nuestra cursiva) (Silva-Corvalán, 2001: 1). A continuación, explicaremos un poco más los conceptos que hemos marcado en cursiva en la frase anterior, en orden inverso:

Los factores sociales a tener en cuenta que consideramos relevantes para este estudio incluyen las formas de organizarse de una sociedad, factores individuales como sexo y edad, aspectos culturales e históricos y el contexto (Silva-Corvalán, 2001: 1). La sociolingüística comparte, por tanto, áreas de interés con otras disciplinas como la sociología del lenguaje, la etnolingüística o la dialectología (Silva-Corvalán, 2001: 4-11).

Una variedad de una lengua, también llamada a veces dialecto, es una modalidad lingüística compartida por una comunidad (Silva-Corvalán, 2001: 14). Incluye idiolectos (forma de expresarse de una persona en concreto), variedades históricas (p. ej. el catalán medieval), variedades diatópicas (el castellano de Murcia, el catalán urbano), variedades diastráticas (castellano de la clase alta) y estándar o no estándar, a menudo combinables (Silva-Corvalán, 2001: 17). Cabe destacar que la palabra dialecto en su uso popular puede tener connotaciones negativas, por lo que en sociolingüística se ha optado por potenciar el uso de la palabra variedad, evitando así esas connotaciones (Silva-Corvalán, 2001: 14).

Finalmente, Silva-Corvalán define el concepto de lengua como un sistema de variedades con una tradición común basada en factores históricos, político-geográficos, sociales y culturales, además de lingüísticos (2001: 17). Son ejemplos de lenguas los sistemas de variedades del catalán y del castellano tratados en este estudio. Por tanto, por las razones desarrolladas en los apartados 1.1 y 1.2 tanto el castellano como el catalán se pueden relacionar de forma directa con

(15)

12

dos entidades histórico-políticas con una extensión concreta en el espacio y en el tiempo como son las coronas de Castilla y Aragón; la mayoría de sus hablantes las suelen considerar como lenguas diferentes; y en lingüística se las suele considerar como lenguas diferentes derivadas del latín, a menudo clasificándolas en familias de lenguas romances diferentes, como por ejemplo en Touratier (2009: 16-17).

Los conceptos adicionales de los que hacemos uso en nuestro estudio son los de hibridación, definido como el empleo habitual de dos lenguas (Generalitat de Catalunya, 2010:

7), el uso de lenguas activo, es decir la producción oral o escrita, y pasivo, que se corresponde con la comprensión oral o escrita (Prada, 2003: 282), así como las lenguas maternas, entendidas popularmente en esta zona como las lenguas que se considera que se dominan. Usaremos en cambio la expresión ‘lenguas iniciales’ para referirnos a las aprendidas durante la infancia y con sus progenitores, siguiendo el ejemplo de Vila Mendiburu (2008: 404) y ‘lenguas habituales’ para las que se considera que uno usa más a menudo en general, independientemente del contexto.

4.1 Actitudes

El estudio del concepto de las actitudes se usa en sociolingüística para tener un indicador de las creencias y preferencias de una comunidad respecto a las lenguas y a otros fenómenos lingüísticos con las que está en contacto (Baker, 1992: 9). Ninguna lengua tiene ventajas lingüísticas inherentes, por lo que las actitudes hacia una lengua son en realidad las actitudes hacia sus hablantes (Edwards 1982: 21 citado por Andersson 2011: 30). Esto se debe a que lengua e identidad están estrechamente ligados y tienen una importancia grande para los humanos (Janés, 2006: 119 citado por Westin, 2013: 10).

El analizar las actitudes puede servir también, por lo tanto, para tener un indicio del futuro del uso de variantes o lenguas y saber la actitud de los hablantes hacia las medidas lingüísticas adoptadas por organismos competentes (Silva-Corvalán, 2001: 63-64), así como para poder definir una comunidad de habla, es decir, un grupo con la misma evaluación de una lengua (Labov, 1972: 158 citado por Silva-Corvalán, 2001: 64).

Un concepto adicional usado en este estudio es el de la tendencia de los humanos de crear una imagen positiva de sí mismos, también en el caso de las actitudes hacia diferentes lenguas, como escribe Silva-Corvalán (2001: 3).

(16)

13

Finalmente, las actitudes descritas en este estudio se dividen en generales, instrumentales e integrativas. Las instrumentales sirven para conseguir un objetivo práctico como encontrar trabajo o mejorar el estatus de uno, mientras que las integrativas persiguen sentirse parte de la mayoría de una sociedad o hacer amigos en ese grupo social (Westin, 2013: 12) y las generales son actitudes que no se adscriben estrictamente a ninguno de los grupos anteriores. Queremos destacar por último que las actitudes integrativas hacia una lengua son más favorables para su aprendizaje que las instrumentales, según un artículo de Gardner y Lambert (1959 citado por Westin, 2013: 14).

5. Presentación y análisis de los resultados

Recibimos un total de 61 encuestas rellenadas, de las cuales tan solo usaremos 30 por razón de las diferentes restricciones impuestas, es decir, estrictamente 15 parejas de padres e hijos con hijos veinteañeros.

Como adelantamos en el capítulo 3, en esta encuesta hay tres tipos de preguntas: datos generales (preguntas 1-5), autoevaluación de nivel y usos (6-14, 16-17) y actitudes (15, 18-26).

Las preguntas sobre actitudes están subdivididas a su vez en actitudes generales (15, 18-21, 26), actitudes instrumentales (23, 25) y actitudes integrativas (22, 24).

El análisis de los resultados está estructurado siguiendo la división anteriormente mencionada y presentado mediante gráficos: autoevaluación de nivel y usos (5.1) y actitudes (5.2): actitudes generales (5.2.1), instrumentales (5.2.2) e integrativas (5.2.3).

(17)

14

5.1 Autoevaluación de nivel y usos

Figura 1. Conocimiento de catalán de los padres según número de respuestas en una escala del 1 al 5, donde 5 representa el mayor nivel y 1 el menor. Fuente: preguntas 6-9.

A continuación, presentamos los resultados de la autoevaluación de nivel de catalán de los padres (ver Figura 1). Les pedimos que se puntuaran en una escala del uno al cinco, en la que uno equivalía a no tener ninguna competencia en ese aspecto de esa lengua, tres a una competencia regular y cinco a una competencia completa. Vemos que hay en su opinión un buen conocimiento pasivo del catalán por parte de la mayoría de informantes: 13 de 15 responden entender el catalán hablado y 12 de 15 el escrito con un cinco. En el caso de los conocimientos activos, están más divididos: 9 de 15 responden saber hablarlo con un cinco, mientras que solo 5 de 15 responden saberlo escribir con un cinco.

No hemos representado en un gráfico las respuestas de este párrafo por lo unívocas que son: el 100% de los padres responden con un cinco en todas las categorías correspondientes al castellano escrito y hablado, tanto activo como pasivo (Fuente: preguntas 10-13). Por su parte, el 100% de los hijos responden con un cinco en todas las categorías de tanto castellano como catalán (Fuente: preguntas 6-13). Seguidamente, presentamos los resultados relacionados con las lenguas habladas con sus progenitores (o lenguas iniciales, ver capítulo 4), las lenguas maternas y las lenguas habituales:

(18)

15 Figura 2. Lenguas usadas con progenitores, lenguas maternas y lenguas habituales por generación. Fuente: preguntas 14, 16 y 17.

En la Figura 2, vemos que la pregunta sobre las lenguas habladas con los progenitores obtiene entre los padres una puntuación de -47, es decir, de un 47% más de uso del castellano que del catalán, mientras que entre los hijos la puntuación es de -23, es decir, de un 23% más de uso del castellano que del catalán. Esto supone un salto generacional de 24 puntos de diferencia (47- 23=24).

Las lenguas maternas, entendidas popularmente como las lenguas que se considera que se dominan (ver capítulo 4), obtienen una puntuación ligeramente más equilibrada que la anterior en ambas generaciones: los padres obtienen una puntuación de 43% más de castellano, mientras que los hijos de 17% más de castellano. Hay por tanto un salto generacional de 26 puntos.

Las lenguas habituales (entendidas como las lenguas que se considera que se usa más a menudo en general, ver capítulo 4), por su parte, muestran una diferencia aún mayor entre generaciones. Los padres usan un 30% más el castellano, mientras que los hijos prácticamente invierten este resultado y usan un 23% más el catalán. El salto generacional es de 53 puntos, aproximadamente el doble que en los dos casos anteriores.

(19)

16

5.1.1 Reflexión sobre la autoevaluación de nivel y usos

A continuación, haremos una reflexión sobre los resultados presentados en el apartado anterior.

El hecho de que varios hablantes del catalán respondan no saber escribirlo perfectamente (ver Figura 1) está relacionado con el intento de sustitución lingüística del catalán por el castellano llevado a cabo en el siglo XX y mencionado en el apartado 1.1. Las respuestas del 100% de los hijos con un cinco respecto a ambas lenguas se explican por la aplicación en todos ellos de la política de inmersión lingüística existente desde los años 80 y mencionada en el apartado 1.2.

El salto generacional en cuanto a la lengua usada con los progenitores (ver Figura 2) está relacionado con los flujos migratorios históricos entre zonas rurales castellanohablantes y zonas industrializadas catalanohablantes mencionados en el apartado 1.1, así como con la cantidad de padres que son inmigrantes de primera o de segunda generación, como hemos señalado en el apartado 3.1. Además, cabe destacar que la puntuación ya mencionada de -47 de los padres es la de más desequilibrio hacia el castellano de este estudio.

También es interesante notar que los resultados a la pregunta sobre las lenguas habituales contrastan con los de las lenguas iniciales (es decir, lenguas usadas con progenitores) de ambos grupos. Del 47% a favor del castellano de los padres y el 23% de los hijos en cuanto a la lengua hablada con sus progenitores se pasa a un 30% a favor del castellano en los padres y un 23% a favor del catalán en los hijos en cuanto a las lenguas habituales, una diferencia de 17 puntos en los padres y de 46 puntos en los hijos. Por tanto, el salto generacional entre los padres y sus progenitores no ha sido tan grande, mientras que en el caso de los hijos, el salto generacional respecto a sus progenitores refleja una diferencia mayor.

La inmersión lingüística vuelve a explicar que haya una diferencia entre lenguas maternas (en su acepción popular, ver capítulo 4) y lenguas habladas con sus progenitores, en las respuestas de ambas generaciones: algunos informantes consideran que dominan las dos lenguas porque las han aprendido y empleado en el colegio, aunque no hayan sido sus lenguas iniciales.

Este salto generacional en cuanto a la diferencia de usos lingüísticos se explica por la inmersión lingüística en la educación de los hijos ya mencionada, pero también por un cambio entre las actitudes de una y otra generación, como veremos en el apartado siguiente.

(20)

17

5.2 Actitudes

A continuación, nos fijaremos en los diferentes tipos de actitudes analizadas: generales, instrumentales e integrativas. Como hemos mencionado en el apartado 4.1, las actitudes instrumentales sirven para conseguir un objetivo práctico como encontrar trabajo o mejorar el estatus de uno, mientras que las integrativas persiguen sentirse parte de la mayoría de una sociedad y las generales son actitudes que no se adscriben estrictamente a ninguno de los grupos anteriores.

5.2.1 Actitudes generales

Figura 3. Lenguas habladas con descendientes, lenguas de identificación y lengua con más estatus por generación.

Fuente: preguntas 15, 18 y 26.

Para comenzar, nos fijaremos en los resultados representados en la Figura 3.

A la pregunta sobre cómo hablan o hablarían con sus descendientes, la respuesta de los padres es más favorable al castellano en un 33%. La respuesta de los hijos es favorable al catalán en un 40%, por lo que hay una diferencia de 73 puntos.

En cuanto a las lenguas de identificación, vemos que en la generación de los padres hay una puntuación que tiende un 30% más hacia el castellano. En cambio, entre los hijos hay una identificación un 23% mayor con el catalán, por lo que hay un salto generacional de 53 puntos.

(21)

18

En el caso del estatus de las lenguas estudiadas, los padres le otorgan un 30% más al castellano, mientras que los hijos casi están en el punto de equilibrio, con un 3% más hacia el catalán. Por tanto, el salto generacional es de 33 puntos de diferencia.

A continuación, presentaremos los resultados a las preguntas sobre cómo creen que hablarán en el futuro, cómo creen que se hablaría en Cataluña si se independizara y cómo creen que sería deseable que se hablase en Cataluña en el futuro:

Figura 4. Previsión y preferencias de usos futuros por generación. Fuente: preguntas 19, 20 y 21.

Los resultados muestran que las actitudes en ambas generaciones son más positivas hacia el catalán que hacia el castellano de forma global en todas las categorías representadas en esta figura menos en una. La excepción la constituye la pregunta sobre usos futuros, en la que los padres obtienen una puntuación favorable al castellano en un 20%. La puntuación de los hijos en esta pregunta es de un 17% a favor del catalán, por lo que hay un salto generacional de 37 puntos.

A la pregunta sobre cómo creen que se hablaría en una Cataluña independiente, los padres son un 23% más favorables al catalán y los hijos un 37% más favorables al catalán, lo que supone un salto generacional de 14 puntos.

Y a la pregunta sobre cómo creen que sería deseable que se hablara en Cataluña en el futuro, coincide que el salto generacional es de 14 puntos como en la pregunta anterior, pero en esta ocasión con un resultado un 33% favorable al catalán entre los padres y un 47% favorable al catalán entre los hijos.

(22)

19

5.2.1.1 Reflexión sobre las actitudes generales

De forma global, vemos que en la generación de los padres hay una actitud más positiva hacia el castellano y en la generación de los hijos una actitud más positiva hacia el catalán en las tres categorías representadas en la Figura 3.

Comparando las lenguas habituales de los padres (ver Figura 2) con las lenguas usadas con sus hijos, vemos que hay una pequeña discrepancia entre estos usos. Por ello y, sobre todo, porque no tenemos constancia de que ninguno de los hijos tenga descendientes, hemos decidido clasificar la pregunta sobre cómo hablan o hablarían con sus hijos como una de actitudes más que de usos, como mencionamos al final del capítulo 3.

En concreto, mientras que los usos habituales de los padres (ver Figura 2) son de un 30%

más en castellano, las lenguas usadas por los padres con sus descendientes son de media un 33%

más en castellano. En cuanto a sus hijos, es interesante que pasen de hablar un 23% más en catalán en la actualidad (ver Figura 2) a creer que hablarían un 40% más en catalán con sus descendientes. Estos 73 puntos de diferencia en la pregunta sobre las lenguas con los descendientes constituyen el mayor salto generacional registrado en este estudio y conlleva que se pueda prever un mayor peso del catalán que del castellano en el futuro. También es significativo que las respuestas de padres e hijos sobre un mismo hecho difieran ligeramente: los hijos responden que hablan con sus progenitores un 23% más en castellano que en catalán (ver Figura 2), mientras que los padres responden que hablan con sus descendientes un 33% más en castellano, por lo que hay un 10% de divergencia en este aspecto. Una interpretación es que se deba a que ambas generaciones vean afectado su juicio respecto a un mismo hecho debido a las diferencias en las actitudes respecto a las dos lenguas estudiadas y en cómo pueden afectar sus respuestas a la imagen que tienen de sí mismos y la que proyectan: sus respuestas a esta pregunta sobre usos tienden hacia los resultados de las preguntas sobre actitudes de ambas generaciones, como veremos en el resto de resultados.

Un ejemplo de esta diferencia en las actitudes está en las respuestas a la siguiente pregunta, sobre las lenguas con las que más se identifican. Comparando con sus lenguas iniciales (ver Figura 2), los padres pasan de un 47% a favor del castellano a un 30% a favor del castellano, mientras que los hijos pasan de un 23% a favor del castellano a un 23% a favor del catalán, por lo

(23)

20

que el cambio es de 17 puntos en los padres y de 46 puntos en los hijos. Cabe destacar que los resultados sobre las lenguas de identificación coinciden exactamente con los de las lenguas habituales, comentados en el apartado 5.1.1.

Finalmente, una interpretación sobre la pregunta acerca del estatus es que las respuestas de tanto padres como hijos estén también parcialmente motivadas por la necesidad de crear una imagen positiva de sí mismos: respecto a las preguntas sobre estatus y lenguas de identificación, hay tan solo 20 puntos de diferencia entre las respuestas de los hijos y 0 puntos en el caso de los padres. Además, es destacable que la respuesta de los hijos a la pregunta sobre el estatus es la más equilibrada de este estudio, con un 3% a favor del castellano.

Continuamos analizando los resultados presentados en la Figura 4. Excepto en la pregunta sobre usos futuros propios, hay una actitud más positiva hacia el catalán de forma unánime. Es destacable que los resultados de la pregunta sobre cómo creen que hablarán en el futuro contrastan con los de usos actuales (ver Figura 2), que son favorables al castellano en un 30% en el caso de los padres y favorables al catalán en un 23% en el caso de los hijos. En la pregunta de usos futuros, obtienen una puntuación favorable al castellano en un 20% en el caso de los padres y favorable al catalán en un 17% en el caso de los hijos. Ambos grupos, por tanto, se imaginan un futuro en el que ellos mismos hablan menos la lengua predominante en su grupo en la actualidad.

Una interpretación respecto a los resultados de esta pregunta es que los informantes del grupo de los padres son conscientes de la tendencia futura a un mayor peso del catalán en su entorno que les puede afectar, mientras que el grupo de los hijos lo interpreta como una tendencia futura al equilibrio, contrastando con sus respuestas a la pregunta sobre las lenguas que usarían con sus hijos (ver Figura 3).

Como hemos mencionado, a la pregunta sobre cómo creen que se hablaría en una Cataluña independiente, los padres son un 23% más favorables al catalán y los hijos un 37% más favorables al catalán, lo que supone un salto generacional de 14 puntos. Nos parece interesante comparar estas respuestas con las de la siguiente pregunta, sobre cómo creen que sería deseable que se hablara en Cataluña en el futuro. El salto generacional sigue siendo exactamente el mismo, de 14 puntos, pero los resultados son todavía más favorables al catalán. Entre los padres el catalán obtiene una puntuación un 33% superior, mientras que entre los hijos es un 47% superior.

Este último dato es el dato de más desequilibrio hacia el catalán registrado en este estudio y coincide exactamente con el de más desequilibrio hacia el castellano a nivel global,

(24)

21

correspondiente a la lengua de uso de los padres con sus progenitores y mencionado anteriormente al comentar la Figura 2. El resultado de las actitudes de los padres respecto a esta pregunta es también el de mayor desequilibrio a favor del catalán en este estudio. Además, es interesante que, pese a que en las preguntas sobre cómo creen que se hablaría en una Cataluña independiente y cómo creen que debería hablarse en Cataluña, al igual que en todas las otras preguntas de este estudio, también hay un salto generacional a favor del catalán o en detrimento del castellano: con 14 puntos de diferencia estos son los menores saltos generacionales registrados en este estudio. Finalmente, la pregunta sobre cómo debería hablarse en Cataluña es la única del estudio en la que ninguno de los 30 informantes ha respondido “más castellano” o

“solo castellano”. Una interpretación al respecto es que ninguno de los informantes ha querido sentir asociada la imagen de sí mismo con los intentos de sustitución lingüística del castellano por el catalán llevados a cabo durante las dictaduras del siglo XX mencionadas en el apartado 1.1, y que además han entendido la pregunta sobre lenguas en una Cataluña independiente como una a corto o medio plazo y la de preferencias como una a largo plazo.

5.2.2 Actitudes instrumentales

Figura 5. Actitudes instrumentales por generación. Fuente: preguntas 23 y 25.

A continuación, presentamos los resultados de las dos preguntas sobre actitudes instrumentales representados en la Figura 5. La pregunta sobre la utilidad para encontrar trabajo obtiene una

(25)

22

puntuación un 10% superior para el castellano en el grupo de los padres, que coincide con la de los hijos hacia el catalán, también exactamente un 10% superior. Por lo tanto, el salto generacional es de 20 puntos.

Por su parte, la pregunta sobre la utilidad general de las lenguas obtiene un resultado un 13% superior para el castellano entre los hijos, una puntuación que sube hasta el 40% a favor del castellano entre los padres, por lo que también en este caso hay un salto generacional a favor del catalán o de la paridad de lenguas de 27 puntos.

5.2.2.1 Reflexión sobre las actitudes instrumentales

Una interpretación respecto a los resultados que acabamos de presentar es que los informantes consideren que el mayor número de hablantes del castellano a nivel mundial haga que esta lengua sea más útil globalmente para otros fines prácticos aparte de la búsqueda de empleo en su zona.

Además, nos parece destacable que la pregunta de actitudes sobre la utilidad general de las lenguas sea la que obtenga una puntuación más favorable al castellano en este estudio entre tanto los hijos como los padres: 13% a favor del castellano para los hijos y 40% para los padres.

5.2.3 Actitudes integrativas

Figura 6. Actitudes integrativas por generación. Fuente: preguntas 22 y 24.

(26)

23

Finalmente, analizamos los resultados de las dos preguntas sobre actitudes integrativas representados en la Figura 6. La pregunta sobre qué lengua les ayuda más a hacer amigos en su entorno obtiene una puntuación favorable en un 7% al castellano entre los padres, mientras que entre los hijos la puntuación es un 23% superior hacia el catalán, por lo que el salto generacional es de 30 puntos.

La segunda pregunta, sobre cuál de las dos lenguas les ayuda más a integrarse en su entorno, obtiene un 7% más de puntuación para el catalán entre los padres y un 23% más de puntuación para el catalán entre los hijos, por lo que el salto generacional es de 16 puntos.

5.2.3.1 Reflexión sobre las actitudes integrativas

Una interpretación respecto a los resultados que acabamos de presentar es que en el caso de los hijos, por razones de edad, han pasado un porcentaje alto de su vida dedicando gran parte de su tiempo a los estudios. La lengua vehicular es allí el catalán por la aplicación de la llamada inmersión lingüística, como hemos mencionado en el apartado 1.1, por lo que hacer amigos en un entorno en catalán o bilingüe resulta más natural para ellos que para la generación de sus padres, en la que varios son inmigrantes de primera generación. La diferencia entre las puntuaciones de los padres a estas preguntas se explica por esto y porque, sin embargo, consideren que el catalán ayude ligeramente más que el castellano para sentirse integrado. Finalmente, también consideramos destacable que sea en las preguntas sobre actitudes integrativas en las que los padres hayan sacado una puntuación más equilibrada a lo largo de este estudio, en concreto con un 7% a favor del castellano y del catalán, dependiendo de la pregunta.

(27)

24

6. Conclusiones

Este estudio sociolingüístico se ha centrado en las actitudes hacia el catalán y el castellano entre veinteañeros del ámbito metropolitano de Barcelona y sus padres. La pregunta a la que hemos buscado respuesta ha sido la siguiente:

- ¿Hay una actitud diferente en los hijos y en los padres hacia el catalán y el castellano?

Hemos respondido a esta pregunta en este estudio, elaborado a distancia usando la herramienta en línea Google Drive y en la que han participado 61 personas, de las cuales hemos estudiado a 30, respondiendo a una encuesta sobre actitudes generales, instrumentales e integrativas.

En el capítulo 1, hemos presentado una introducción a la historia contemporánea y extemporánea de las lenguas estudiadas, además de introducir el estado de la cuestión mediante dos estudios elaborados por la Generalitat de Catalunya.

En el capítulo 4, hemos explicado los conceptos relacionados con la actitud y sus tres vertientes que hemos considerado que tenían relación con nuestro estudio: actitudes generales, instrumentales e integrativas.

Teniendo en cuenta estas explicaciones y el análisis del capítulo 5, la conclusión principal es la siguiente: que hay una actitud más positiva hacia el catalán que hacia el castellano entre los hijos que entre los padres.

Para hacer esta afirmación, que coincide con nuestra hipótesis inicial, nos basamos en los resultados de nuestra encuesta, que en todas las preguntas sin excepción dan un resultado que evidencia un salto generacional favorable al catalán respecto al castellano entre la generación de los padres y la de los hijos.

Además de esto, también concluimos que el tipo de actitud al que más peso dan los encuestados respecto al catalán es el integrativo en ambas generaciones y grupos, por encima del instrumental o de factores como el estatus, cosa que favorece su aprendizaje por parte de los que tienen el castellano como lengua inicial. Adicionalmente, en la generación futura se podría equilibrar el peso del castellano y el catalán en Barcelona en cuanto a lenguas iniciales (lenguas habladas con los progenitores) se refiere o incluso desequilibrar a favor del catalán, teniendo en cuenta las respuestas de los hijos de ambos grupos a la pregunta de qué lengua usarían con sus hijos y a la mayor hibridación (uso habitual de dos lenguas) por parte de los hijos cuya lengua inicial es el castellano. Esta última conclusión coincide con la del estudio sobre lenguas entre los

(28)

25

jóvenes catalanes elaborada por la Generalitat (ver apartado 1.3). Finalmente, hemos visto que hay más informantes con el castellano como lengua inicial, pero un número mayor de ellos que tienen al catalán como lengua de identificación, coincidiendo con el otro estudio de la Generalitat comentado (ver apartado 1.3).

Juzgamos que, pese a lo modesto de nuestra muestra estudiada, la pregunta principal del estudio ha quedado respondida y por lo tanto se ha cumplido con el objetivo.

(29)

26

7. Bibliografía

Alvar Ezquerra, Jaime (2001). Diccionario de historia de España. Ediciones Istmo, Madrid.

Andersson, Pierre (2011). Actitudes hacia la variedad caló: un estudio sociolingüístico de adolescentes andaluces. Tesis doctoral. Göteborgs Universitet. Inst. för språk och litteraturer.

Artola, Miguel (1999). La monarquía de España. Alianza Editorial, Madrid.

Baker, Colin (1992). Attitudes and language. Multilingual Matters Ltd, Clevedon.

Climent, Teresa (1986). Realitat lingüística a la Val d’Aran. Generalitat de Catalunya, Imprenta Juvenil, Barcelona.

Gardner, R.C. y W.E. Lambert (1959). “Motivational variables in second language acquisition”.

Canadian Journal of Psychology 13, 266-72.

Janés, Judit (2006). “Las actitudes hacia las lenguas y el aprendizaje lingüístico”. Revista Interuniversitaria de Formación de Profesorado. 20, 2: 117-132.

Labov, William (1972). Sociolinguistic patterns. University of Pennsylvania Press, Philadelphia.

Mallart Navarra, Joan (2006). Multilingüisme i educacíó. Edicions Universitat de Barcelona.

Pastor i Pujadó, Montserrat (1997). Competència, ús i actituds lingüístics a Viladecans: Els alumnes de 8è d’EGB del curs 1996/97. Tesis doctoral. Universitat de Barcelona.

Prada, Massimo. (2003) “Glossario”, en Bonomi, Ilaria et al. (ed.), Elementi di linguistica italiana. Carocci Editore, Roma.

(30)

27

Silva-Corvalán, Carmen (2001). Sociolingüística y pragmática del español. Georgetown University Press, Washington, D.C.

Turell, M. Teresa. (2001) Multilingualism in Spain: Sociolinguistic and psycholinguistic aspects of linguistic minority groups. Multilingual Matters Ltd, Clevedon.

7.1. Fuentes electrónicas

ASOLC. (2007) “La situació sociolingüística als territoris de parla catalana a l’inici del segle XXI.” [En línea]. Disponible en http://www.ub.edu/slc/socio/situacioactualcatala.pdf [Fecha de consulta: 2 de octubre de 2013].

CEO. (2013) “Baròmetre d’Opinió Política. 1a onada 2013.” [En línea]. Disponible en http://premsa.gencat.cat/pres_fsvp/docs/2013/02/21/10/47/7f6d7ac7-09f6-4b12-a676-

2ee95a051b10.pdf [Fecha de consulta: 30 de octubre de 2013].

CIS. (2012) “Frecuencias marginales unidimensionales del estudio 2970.0.0.” [En línea].

Disponible en http://www.cis.es/cis/export/sites/default/- Archivos/Marginales/2960_2979/2970/e297000.html [Fecha de consulta: 3 de noviembre de 2013].

DOGC. (2010) “Llei 23/2010.” [En línea]. Disponible en http://portaldogc.gencat.cat/utilsEADOP/PDF/5681/1099643.pdf [Fecha de consulta: 4 de diciembre de 2013].

Fairweather, Eden. (2013) “Las actitudes de profesores de español como lengua extranjera (ELE) hacia las variedades dialectales del español.” [En línea]. Disponible en http://su.diva- portal.org/smash/get/diva2:639907/FULLTEXT01.pdf [Fecha de consulta: 13 de octubre de 2013].

(31)

28

Generalitat de Catalunya. (2003) “Estadística d’usos lingüístics a Catalunya 2003.” [En línea].

Disponible en http://www.idescat.cat/cat/idescat/publicacions/cataleg/pdfdocs/eulc2003.pdf [Fecha de consulta: 4 de diciembre de 2013].

Generalitat de Catalunya. (2004) “Enquesta d’usos lingüístics a la Catalunya Nord.” [En línea].

Disponible en

http://www20.gencat.cat/docs/Llengcat/Documents/Dades%20origen%20territori%20i%20pobla cio/Altres/Arxius/catnord2004.pdf [Fecha de consulta: 3 de octubre de 2013].

Generalitat de Catalunya. (2007) “Llengua i societat als territoris de parla catalana a l’inici del

segle XXI.” [En línea]. Disponible en http://www20.gencat.cat/docs/sue/Afers_Exteriors_Cooperacio/03_POLITICA_EXTERIOR/2_2

_Ambit_tematic/2_2_5_CCE/LLENGUA%20I%20SOCIETAT,%20INICIS%20s.%20XXI.pdf [Fecha de consulta: 2 de octubre de 2013].

Generalitat de Catalunya. (2009) “Enquesta d’usos lingüístics de la població 2008.” [En línea].

Disponible en

http://www20.gencat.cat/docs/Llengcat/Documents/Dades_territori_poblacio/Altres/Arxius/EUL P08_PresentResultats.pdf [Fecha de consulta: 13 de octubre de 2013].

Generalitat de Catalunya. (2010) “Llengua i joves. Usos i percepcions lingüístics de la joventut

catalana.” [En línea]. Disponible en http://www20.gencat.cat/docs/Joventut/Documents/Arxiu/Publicacions/Col_Aportacions/aportaci

ons43.pdf [Fecha de consulta: 13 de octubre de 2013].

Generalitat de Catalunya. (2013) “Estadística d’usos lingüístics de la població.” [En línea].

Disponible en

http://www20.gencat.cat/portal/site/Llengcat/menuitem.b318de7236aed0e7a129d410b0c0e1a0/?v

References

Related documents

Este artículo presenta las herramientas meto- dológicas necesarias sobre los usos que se pueden hacer de la memoria y también de cómo escribir la historia de hechos complejos

En contraste con las otras tipologías presentadas, dentro de la clasificación del MCER existen varios tipos de errores, desde la fonología hasta el contenido global, lo que

Si se mi permi- ten una más provocación, en la Academia Europea, la influencia pos-im- perio romano, la influencia Napoleónica, la dominancia e influencia germana,

El objetivo de este estudio es mostrar qué actitudes hacia la enseñanza de lengua materna castellana tienen los alumnos que participan en estas clases.. El estudio se ha

La enseñanza de la asignatura de lenguas modernas debe tener como objetivo que los estudiantes desarrollen el conocimiento de la LM y que tengan confianza en su capacidad de usar

No solo se expresa que los países hispanohablantes no han alcanzado un nivel suficientemente alto para tal cambio, sino también se hace una comparación tanto entre

El objetivo de este estudio es investigar las actitudes lingüísticas de los profesores de español como lengua extranjera (ELE) hacia la variación dialectal del español

La estrategia que sugerimos como la alternativa más adecuada según nuestro objetivo es: primero analizar todas las alternativas existentes de traducción, usando por ejemplo